La vida estudiantil no está exenta de dificultades y una ayuda para concentrarte en las tareas, actividades o el descanso por la inmensidad de proyectos que tienes que entregar. Estos suplementos para tener una mejoría de bienestar en todos los aspectos no están de más, click aquí. Cualquier situación de estrés, debes tomar decisiones rápidas y adoptar consejos diarios para vivir más tranquilo y recuperar el control de ti mismo.
La “actitud positiva”
En primer lugar, es necesario identificar la fuente del estrés y preguntarse si su reacción es adecuada a la situación o si es exagerada. A menudo hacemos una montaña de la nada por un impulso negativo. Lo mejor es ser positivo y no dejarse agobiar a la hora de afrontar la tarea que se te asigne. Desdramatizar y diferenciar entre problemas graves y pequeños líos cotidianos. Siendo optimista, estarás en posesión de todos tus medios para afrontar tus misiones diarias.
Organizarse
Aunque la vida esté llena de imprevistos, pon todas las posibilidades de tu lado para evitar el “estrés de última hora”. Una buena gestión del tiempo solamente te beneficiará. Anota claramente en un diario todas las cosas importantes que hacer, haz listas diarias en orden de importancia y tacha tareas a medida que avanzas, esto da la impresión de avanzar y no olvidar nada.
¡Libera tensiones, descomprime y date un capricho por encima de todo!
¿Estás agotado? No te dejes abrumar por las tensiones, libérate y expresa tus sentimientos, ya sean positivos o negativos. Tómese momentos de relajación para olvidarse de las preocupaciones dándose un capricho: lea un buen libro, escuche la música que le guste, tome un baño caliente, déjese mimar, vaya de compras. Existen tantas actividades que te permiten despejar tu mente y alejarte de las molestias.
Métodos sencillos para relajarse y dejarse llevar
La solución más sencilla para combatir el estrés es respirar bien. La respiración abdominal es la base de toda relajación (yoga, sofrología, etc.). Todo lo que tienes que hacer es inhalar profundamente mientras inflas el estómago, la caja torácica y los hombros se elevan al mismo tiempo, luego exhala lentamente por la boca. Imagina respirar energía y calma y expulsar tensiones y pensamientos negativos. El yoga, en particular, te enseña a respirar y regenerarte utilizando posturas, reglas y principios elementales de una vida saludable. Las medicinas alternativas también son muy buenas formas naturales de limitar eficazmente el estrés diario. La homeopatía resulta ser una excelente alternativa a la toma de medicamentos psicotrópicos. Hace que el cuerpo reaccione, le ayuda a aprovechar sus recursos más íntimos. La homeopatía también tiene la ventaja de no provocar dependencia ni somnolencia. Cada reacción al estrés (memoria, fobia, insomnio, etc.) puede tener una respuesta homeopática, pero actúa como medida preventiva. Así que no espere hasta estar estresado para consultar, ¡anticipe si conoce sus tendencias a reaccionar con estrés!
Un estilo de vida saludable es esencial
Además, gestionar el estrés también implica llevar una vida sana. La dieta debe ser equilibrada: nunca te bastará, debes comer al menos 4 frutas y verduras, beber 1,5 L de agua al día y no saltarte comidas para cubrir todos los gastos energéticos (una mujer debe consumir una media de 2.000 a 2.500 calorías). Y para un hombre de 2.500 a 3.000 calorías al día. Durante períodos de estrés intenso, las reservas de magnesio se agotan y nos volvemos nerviosos e irritables. Sin embargo, representa un elemento esencial para el buen funcionamiento del cerebro y del sistema nervioso y la ingesta diaria recomendada es de 500 mg. Se encuentra en el pan integral, cereales, chocolate negro, plátanos, frutos secos (almendras, avellanas, etc.). Es aconsejable evitar estimulantes como el tabaco, el alcohol, el té, el café y el exceso de azúcares que, aunque tengan un lado reconfortante y estimulante, solamente te convertirán en una bola de nervios infernal.
