Aunque todavía existe mucho tabú en el mundo, acerca del sexo, hay quienes se interesan profundamente por conocer, entender y experimentar un orgasmo. Y ¿Quién no? Cualquier ser humano que disfrute de su sexualidad debería tener conocimientos al respecto.
En la actualidad, existen muchas maneras de conseguir el orgasmo tanto en solitario como en pareja. De hecho, diversas Sex Shop Barcelona poseen juguetes y elementos geniales para ayudarte en tu proceso.
Con base en ello, en esta ocasión te adentraremos en el fascinante mundo del orgasmo para que puedas saber qué es, sus beneficios e incluso cómo experimentarlo en pareja. Desde ahora tus encuentros sexuales irán mucho más allá. ¿Preparado? ¡Empecemos!
Definiendo un orgasmo
En teoría, un orgasmo da cierre a un encuentro sexual (aunque en ocasiones solo es el inicio de algo más intenso). Es considerado el clímax causante de una sensación sumamente placentera de liberación. La tensión acumulada se va y da paso a la excitación. Por esa razón, muchos experimentan espasmos musculares muy intensos e incluso agradables.
Durante el orgasmo se liberan endorfinas producidas simultáneamente. ¡Es una explosión de placer! Aunque dura tan solo unos instantes resulta un momento muy relajante. El cuerpo se libera, la circulación de la sangre y la respiración vuelven a su cauce, y la somnolencia tiene lugar para un descanso garantizado.
¿Existen varios tipos de orgasmos?
Los tipos de orgasmos surgieron tras investigaciones inconclusas de expertos que no llegaron a un consenso con respecto al tema. De allí que Sigmund Freud haya definido el orgasmo femenino en jóvenes como clitoriano y en mujeres mayores como vaginales. Ambas opciones sumamente saludables y placenteras.
En este sentido, también es preciso comentar los tipos de orgasmos definidos por la investigadora sexual Betty Dodson, quien definió nueve orgasmos diferentes.
Entonces, para que conozcas más de la investigación, te comentaremos algunos tipos, empezando por los orgasmos de presión generados por la estimulación indirecta tras el aplique de presión. También está el suscitado tras la profunda relajación durante el estímulo sexual.
Asimismo, encuentras el orgasmos combinado o mezclado que surge tras varias experiencias orgásmicas. El múltiple se da un poco tiempo, mientras que el de tensión se genera por el estimulo directo cuando el cuerpo y los músculos se tensan.
Por otro lado, hay otros modelos de orgasmos definidos por otros investigadores, tales como el de fantasía generado únicamente por la estimulación mental a solas. También está el de punto G que resulta tras el estimulo erótico de la penetración.
Los maravillosos beneficios de un orgasmo
Los expertos recomiendan los orgasmos no solo porque sí. Existen muchísimos beneficios que resultan maravillosos para todas las personas. ¡Y no solo hacemos referencia al placer! En realidad, son muy buenos para la salud.
Un buen orgasmo genera un déficit calórico
Aunque no lo creas, mientras más intenso sea el orgasmo mayor quema de calorías habrá. Investigaciones han asegurado que mantener relaciones sexuales durante una hora crea una pérdida de entre 100 a 200 calorías. ¡Es la manera perfecta de estar en forma!
Refuerza el sistema inmune
Alcanzar un orgasmo aumenta la probabilidad de producir mayor cantidad de anticuerpos en el organismo, combatiendo infecciones y resfriados.
Fomenta el descanso apropiado
Si sufres de insomnio, una buena sesión de sexo con tu pareja o de masturbación te ayudará a llegar al orgasmo para descansar. ¿Cómo es posible? Durante el acto se liberan endorfinas y oxitocina que sirven como ansiolíticos, ayudando con el concilio del sueño.
¡Dile adiós al estrés y dale la bienvenida a la autoestima!
Las endorfinas y la oxitocina no solo funcionan para el conciliar el sueño, también sirven para relajar la menta y eliminar el estrés. Además, un buen orgasmo potenciará el aumento de la autoestima. Te sentirás mucho mejor.
Son geniales para el corazón
Un estudio realizado en Massachusetts, EE.UU, estableció que los hombres de 50 años con más encuentros íntimos habían reducido en un 45% el riesgo de enfermedades cardiacas. La razón es que durante el sexo se reduce la presión de la sangre.
Mejora el aspecto de la piel
La circulación de la sangre aumenta y el oxigeno bombea hacia la piel durante un orgasmo. Por ello gana mayor brillo, eliminando toxinas y haciéndola lucir perfecta.
¡Te quitará hasta 10 años de encima!
Es sencillo. Mientras más orgasmos tengas y más intensos sean, reducirás hasta 10 años, y es literal. Mantener tus encuentros sexuales sanos te hará vivir por más años.
Es el mejor analgésico
La liberación de endorfinas durante el sexo, en definitiva, es el remedio natural para todos los males. Como hormona de la felicidad te ayuda a aliviar dolores de cabeza, migrañas y mucho más. ¡Comienza a tener más orgasmos!
Tener orgasmos con tu pareja ¡Es posible! sigue estos consejos
- Comuníquense y conózcanse: es importante la confianza y el conocimiento con la pareja. Hablen de lo que prefieren, de aquello que les gusta. Intenten ir más allá para mejorar cada encuentro sexual. De allí partirá el hecho de saber qué funciona o no, con cada uno
- Ritmo: no siempre funciona ir a todo lo que da. Para alcanzar el orgasmo muchas veces se requiere delicadeza y suavidad para que tu pareje llegue al máximo. Por supuesto, el placer será en conjunto.
- ¡No te apresures!: no se trata de una carrera. Disfruten el encuentro. Conózcanse. Usen juguetes sexuales para potenciar la excitación; por ejemplo, el Satisfyer sería una buena opción. Vayan paso a paso y al final verán que fue lo mejor.
- Dejen de lado el egoísmo: es importante mencionarlo porque pasa mucho que las parejas dejan de llegar al orgasmo en conjunto por no esperar ni escuchar al otro. El sexo no acaba cuando el hombre eyacula, es esencial ser compañía también en el encuentro sexual, apoyar y dar paso a un sinfín de opciones para que ambos disfruten.
- Olvídense del tabú: por último, el mejor consejo es olvidar los tabúes y disfrutar de la sexualidad a plenitud. Como placer de la vida, merecen conocerse y complacerse.
